Aunque no tengo la longevidad que tienen muchos de los residentes de Humboldt Park, puedo empatizar el mismo profundo dolor que sienten muchos cuando alguien de este barrio pierde su hogar a favor de alguien con más recursos. Nuestro barrio nunca era perfecto – había violencia de pandillas, teníamos calles feas, nuestras escuelas faltaban apoyo económico – pero éramos vibrantes y hacíamos todo lo posible para crear una comunidad de mucho amor y orgullo.
La gentrificación es horrible. Éso no es opinión. Muere un pedazo de mi infancia cada vez que veo un nuevo condominio con gente que no son de aquí. Muere un pedazo de mi infancia cada vez que veo una nueva tienda que dedica sus negocios a los que tienen los bolsillos más llenos. La realidad es que tengo miedo de que mi barrio no existirá en cinco años.
Estos sentimientos y preocupaciones me animaron “Humboldt.” Nunca tuve la intención de incluir este tema en mi proyecto “Desamor y Jangueo” pero una semana antes de nuestra presentación en el WEPA Mercado, encontré las palabras correctas para expresar lo que siento. Fue difícil expresar no solamente lo qué está pasando aquí en Humboldt Park, sino también de lo que está sucediendo en Puerto Rico al respecto de la conversación de convertirse en un estado. Similar a lo que siento sobre Humboldt Park, Puerto Rico está viendo muchos cambios en la isla a causa de la economía global. Pero parece que estos cambios benefician a todos menos el pueblo de Puerto Rico y todos deberíamos de estar pendientes de lo que está pasando. De lo que he leído y escuchado, muchos negociantes extranjeros y negocios turísticos se han aprovechado de muchos lugares de la isla, que al final del día, como ya mencioné, no beneficia al pueblo. La gente de Puerto Rico, así como las personas de Humboldt Park, tiene el derecho de usar sus voces como instrumentos para decidir lo que quieren para el futuro de sus hogares y familiares. Ningún negociante o político tiene el derecho de quitarnos ese privilegio, y eso es exactamente de lo que se trata el sencillo “Humboldt.”
“Canta Mi Pueblo y así vamos a ganar, este barrio no es de ellos, y te lo voy a jurar, que si queremos, Humboldt Park y Puerto Rico siempre estarán.”
Mi objetivo con este coro era comunicar a mis oyentes que nuestras voces tienen bastante poder. Sé que a veces nos podemos sentir pequeños o inferiores a los políticos o grandes organizaciones, pero la historia de nuestras raíces nos han enseñado que unidos, podemos exigir cualquier cambio que queramos. No espero que esta canción cambie lo que está pasando en Humboldt Park o en Puerto Rico, pero espero que por lo menos pueda dar un poco de confianza al pueblo en el poder de sus voces.